Here I Am

«…El escritor quiere escribir su mentira y escribe su verdad.…»
Ramón Gómez de la Serna

En ocasiones hay asuntos —el comentario de alguien, un acto público, un hecho puntual la reminiscencia de un recuerdo o el impacto de un titular— que producen una breve reflexión, algo no excesivamente importante, una idea que muchas veces no transciende más allá de un párrafo o un par de frases. Nada que ver con los artículos algo más sesudos (sic) que trato de publicar mes a mes en la SALA DE LECTURA de mi página web. Como digo, son reflexiones breves, inmediatas, personales, insignificantes, cotidianas. Deliberaciones que carecen de magnitud o alcance, pero que, en muchas ocasiones, me apetece plasmar por escrito, negro sobre blanco, a fin de dejar constancia y compartirlas con aquellos amigos que visitan asiduamente mi página web. Hasta ahora no había tenido ocasión llevarlo a la práctica e ignoro si la idea será todo lo buena o mala que aparenta, pero tras meditarlo he considerado, con mayor o menos acierto, que el espacio natural de esa colección de «desbarres mentales» podría ser un blog, un medio que cuenta con aparentes ventajas añadidas ya que, 1) el formato permite ser actualizado de una manera mucho más frecuente y fluida que la periodicidad mensual de mi web y 2), la inmediatez del feedback que produce un blog a través de los comentarios de sus visitantes es una herramienta de incuestionable valor para mantener un contacto más directo y preciso con aquellos que dicen disfrutar con mis libros y mis escritos. Y, además, la experiencia me apetece.

Y, por ese motivo, aquí andamos.

Así que hayas llegado hasta aquí por el camino más directo o el vericueto más impracticable, bienvenido seas. Pasa, ponte cómodo y disfruta. O no. Tú decides.

Un cordial saludo,

Pedro de Paz